Ten Years After

Y no me refiero al grupo de rock setentero del mismo nombre (clickad aquí para verlos en acción en Woodstock en el 69) si no a Parko que, diez años después de haber ganado su primer CT en Jeffrey’s Bay –entonces como wild card- ha repetido victoria esta mañana. Y desde luego podemos asegurar que ha ganado el mejor: su puntación media -de las 5 mangas en las que ha entrado- ha sido de casi 17 puntos (16,91 para ser más exactos). Es decir una media de 2 olas de 8’5 puntos por manga. Y además él solito ha realizado 2 de las 5 olas que han conseguido la máxima puntuación del campeonato (10 puntos); aunque hay que reconocer que alguna de las olas que Slater surfeó en su manga contra Nic Muscroft también se merecía un diez. Han sido dos días y medio intensos de competición en condiciones muy buenas. Pero vayamos por partes:

1.- Parko afianza su liderato en el ranking ASP. Ha ganado 3 de las 5 pruebas disputadas hasta el momento. Este puede ser su año…

2.- Curiosamente comenté hace unos días que Parko y Taylor Knox eran mis dos surfistas preferidos en Jeffreys Bay. Parko ganó la prueba y Taylor eliminó a Slater. Ahora me pregunto por qué no los incluí en mi Fantasysurfer Team?!?

3.- También dije que con un poco de suerte íbamos a ver surfing del bueno, de ese que da igual si se celebra durante un evento o no. Creo que en ese aspecto hemos estado de suerte… con gente como Michel Bourez (yo también opino que su última ola contra Aritz -y su 10 contra Fanning- fueron excesivos), Jordy Smith, Dane Reynolds y Sean Holmes que han dado espectáculo como si estuvieran en una sesión de surf libre. De hecho un pro comentó (respecto a la manga entre Jordy Smith y Dane Reynolds) que “Jordy es capaz de hacer todo lo que Dane hace en una ola; pero Dane surfea una manga como si estuviera en un baño libre y Jordy no.”

Sean Holmes contra Taj. O como a veces es suficiente con conocerse la ola como la palma de su mano.

4.- Pocas novedades a nivel de tablas. Sean Holmes (qué estilo… y qué lectura de ola!!) surfeó con una 6’3’’ shapeada por Dean Geraghty en epoxi (con el viento que hacía y lo bacheada que estaba la superfície del agua!!). La tabla iba equipada con cajetines Four Way Fin System, que permiten mover la quilla alante y atrás y abrir y cerrar más o menos el ángulo de la misma respecto a la tabla. Slater surfeó con la misma tabla con la que ganó en Trestles el año pasado; parece que ha dejado los experimentos de las 4 primeras etapas de este año de lado. La tabla de recambio de Dane Reynolds en su manga contra Sean Holmes era un twin fin; lástima que no llegó a utilizarla. Y en general la mayoría de pros utilizaban tablas un pelín más largas que de costumbre (6’2’’ o 6’3’’), para contrarrestar los efectos del viento en la superficie de las olas. Y se me olvidaba: en la segunda manga del Clash of the Icons (Occy contra Curren, entre las semis y la final) Curren utilizó una tabla prestada por Slater que nunca antes había surfeado. ¿Quizá por eso perdió esa manga?

La primera de las dos mangas del Clash of the Icons. Ganada por Curren.

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Pero se puede decir que el CT de Jeffrey’s Bay a muy duras penas ha logrado eclipsar la gran tormenta informativa que asola el mundo del surf profesional en estos momentos. Todo empezó con la columna de Phil Jarrat (reputado periodista y escritor de surf) en el periódico de su localidad. En ella informaba que Slater, junto con otras personas, están organizando un circuito de surf profesional paralelo al de la ASP para a partir del 2010. Slater ha manifestado en varias ocasiones que no le gusta el formato actual, y según su versión un grupo de inversores se puso en contacto con él para montar un circuito de surf profesional alternativo. De momento se sabe poco sobre el tema, y nada de cierto, pero por lo que he podido averiguar por la blogosfera desde que salió la noticia:

a) Este circuito de surf profesional contaría únicamente de 16 surfistas invitados (Slater + 15) buscando siempre el surf más progresivo.

b) Se disputarían 8 pruebas al año, de Julio a Diciembre, y por un mínimo de 3 años. Slater ha confirmado que participará –al menos- esos tres primeros años.

c) La suma total de premios a repartir en cada prueba sería de 1.5 millones de USD. Ahora mismo el vencedor de una prueba del WCT recibe 40.000USD. Esta es la cifra que se llevaría un surfista eliminado en la primera ronda en el nuevo circuito.

d) Por lo que parece los contratos de patrocinio para este nuevo circuito se están cerrando con empresas ajenas al mundo del surf. También se están cerrando acuerdos con ESPN para retransmitir (¿en directo o un resumen largo de toda la prueba al final de la misma?) las pruebas de este nuevo circuito por la televisión.

e) A diferencia de las pruebas del WCT actuales, el equipo encargado de la difusión de cada prueba (media & webcast) sería el mismo para todo el circuito y ajeno a las marcas que patrocinen cada prueba. Para así poder potenciar el circuito al máximo más allá de los intereses de los patrocinadores.

Todo esto plantea muchas dudas:

-¿Coexistirán dos circuitos profesionales (WCT y el de Slater)?

-En caso afirmativo, los miembros del WCT no podrán participar en el nuevo circuito –a menos que cambien las reglas de la ASP-. ¿Habrá desbandada de los miembros del CT invitados por Slater hacia el nuevo circuito o, al contrario, este se nutrirá principalmente de gente que no está en el CT ni en el QS (Bruce Irons, Clay Marzo, Jamie O’Brien y demás freesurfers)?

-¿Que pasará con el WQS en caso de que desaparezca el WCT y se sustituya por este nuevo circuito? ¿De que servirá estar luchando a tope todo el año si luego no te invitan a participar al nuevo circuito?

-¿No hay conflicto de intereses que Slater sea -a la vez- competidor y uno de los dueños del nuevo circuito?

-Y qué dirá la industria del surf (Quik, Billabong, Rip Curl, etc…) si se ven privados de uno de sus principales instrumentos de promoción como son los Ctos. del WCT? ¿Cómo contratacarán? ¿Y la A.S.P.?

Muchas preguntas en el aire; habrá que esperar para ver qué pasa. Curiosamente estas incógnitas se daban mientras asistíamos a la mejor prueba del CT en lo que llevamos de año: muy buenas olas, mucho surf progresivo y radical, un webcast de lujo y sin polémicas excesivas. ¿Quizá -al fin y al cabo- el WCT no está tan mal?